El
TAG es la firma del escritor. También conocidos como los rayados
callejeros, picturograffiti o chapa157, el tag es
una forma personal
de identificarse en la ciudad y de dejar rastro de donde

se
estuvo. Su presencia es también la presencia del escritor. Una necesidad
de ser reconocidos provoca la elaboración y reiteración de
firmas.

En
los comienzos la cantidad de tag de un escritor, hablaba del
respeto que se le daba a ese escritor. Son realizados con plumones
de tinta, lápices, cera, piedras, clavos y brochas pero

principalmente
con aerosol, por su rapidéz de secado y poder cubridor.
Se realiza en cualquier lugar. Como dice el escritor Drips,
“Si el lugar es complicado, de difícil acceso tiene un valor

agregado.
Hay gente que lo hace por protesta, por que le gusta hacer
maldades o para dejar tu marca.”

Existe cierta
satisfacción por
lograr pintar en lugares de difícil acceso y en quebrantar la

ley.
En este punto también está de acuerdo el escritor Pohyo: “Si salgo
a rayar quiero que la gente sepa que yo existo. Cuanto peor o
cuanto mejor sea el soporte, más valor tiene. Por ejemplo si

escalo
un segundo piso de una casa y pego un tag en el techo tiene
mucho más valor que en un portón.”

Realizar
tag es una práctica que todos los escritores han vivido. Es
una forma de empezar a mostrarse en la calle. El tag es un anonimato
a través de un pseudónimo.

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